1.6.09
CagArte
Será mi falta de comprensión, mi egoísmo, la xenofobia o la manifestación de mi mal genio, no lo sé. Lo cierto es que mis vecinas me tienen harta y no sólo porque no boten la basura y la dejen dentro o fuera de la puerta, que no laven sus platos (que son un montón), que cada noche inviten a una docena de turcos a cenar en el piso, que paren cantando ( ojalá cantaran bien) que ocupen toda la nevera y que no cierren la puerta. Hoy ya me sacaron de quicio por dejar una ay-cuan-sofisticada muestra del arte contemporáneo en el baño…. Y no es la primera vez. Abajo el testimonio.
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