De pequeña siempre coleccionaba cosas: pegatinas de chicles, imanes de yogures de esos que se pega a la nevera, hojas con dibujos que se intercambiaban entre amigos, los juguetes de Kinder Suprise, igualito que todo el mundo. Ahora colecciono puntos aéreos, puntos en la librería y, si tuviera coche, seguro coleccionaría puntos de las gasolineras. A veces me pasa que quiero volver a los tiempos cuando todo el mundo se volvía loco por las pegatinas de Scooby Doo. Antes lo hacíamos por la mera satisfacción de coleccionar, por la oportunidad de jugar con los amigos aunque fuera sólo gastar la pequeña cantidad de plata que teníamos en guardar más y más objetos-basura en nuestros cajones. Ahora nos hacemos coleccionistas con fines concretos. Los puntos que tienes los cambias no por otros puntos (eso sí sería una huevada), sino por regalos. Bueno, tampoco me puedo quejar. Ayer me enteré de que mis puntos acumulados de LAN me dan un vuelo gratis. Pero, pucha, es un vuelo dentro del Perú (o dentro de Chile) y mis pies actualmente y desgraciadamente pisan la tierra del viejo continente y el Perú sólo lo estoy viendo en mi colección de postales.
6.5.08
coleccionistas
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1 comentario:
me gusto tu post. Yo soy coleccionista (http://argentinatoycollector.blogspot.com/) de juguetes. Y me llamo la atencion la idea de solo coleccionar por la emocion en si de hacerlo, tal cual como cuando eramos chicos. Ahora se mezcla, aun en mi caso, que colecciono juguetes la idea de la practicidad o del valor a futuro, yo por ejemplo una de mis razones para coleccionar es poder comprar un casa para mis hijos en un futuro cercano. No niego que disfruto haciendolo y calma muchas ansiedades y hasta me ha permitido compartir más tiempo con mi familia haciendo algo en común (somos todos coleccionistas). Pero quien pudiera dejar de lado un poco la responsabilidad de ser grande con una familia a cargo y tener un poco de despreocupación infantil! saludos.
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