30.6.08

Entre dos canchas

Ayer por la noche no me podia despegar de la pantalla viendo el final de la Eurocopa.

A por ellos, OOOEEEEEEE!

Yo cuando empezaba el partido



Yo entre las dos canchas:



Yo celebrando ;)

28.6.08

Conteo regresivo

Empezó el conteo regresivo. Se acabó el año académico, (yeeee) He aprobado todo y me estoy mudando y arreglando las últimas cosas que me quedan antes del viaje (mi cuarto está hecho una cuadra, no se imaginan).

También me mandaron ya dos recordatorios de vuelos (como si pudiera olvidarme de ellos).

Ayer iba a publicar una entrada pero me dormí de cansancio casi encima del teclado y decidí no publicar nada. Aquella entrada me parece ahora bien fea, mejor la boto que hoy me siento un poco aliviada, después de 2 días sin tocar la comida hoy me dio un hambre, por tanto tal vez no me muera (hemos comido rico en la parrillada de J.)

Descubro que las cosas que hago superan mis fuerzas y además actúo de una manera demasiado emocional. Ocurre que estoy harta de escuchar críticas constantes y las frases que me dicen que qué ingenua que soy: despiertan en mí unas ganas enormes de salir corriendo a donde sea y quizás no volver.

Apesar de la mudanza tendré que hacer maletas y partir. Ay, como no me gusta todo ese rollo de escribir listados de las cosas necesarias y correr de una tienda a otra para adquirir detalles que me faltan. Por eso no pienso llevar mucho. Luego tendré que cargarlo yo y cuando me lo pienso, se me ocurre llevar una maleta vacía.

Mientras no esté por favor, den de comer a Xan Xan.

Por si alguien planea estar el 2 de julio en el Prat que me acompañe mientras esté esperando otro vuelo.

J. me dio un abrazo de despedida (las despedidas son feas) y me dijo que no hiciera tonterías estas vacaciones. (Que te voy a controlar…) Este año seré buena chica, me lo prometo.

27.6.08

ay, amor que se fue por el aire

Aquel día de febrero la señorita de la taquilla en el aeropuerto me miró con cara de consentimiento infinito. Sin poder controlarme y dejar de llorar le dejé aquellos 30 dólares que me pedía. Tal vez creía que lloraba porque tenía que gastar mis últimos billetes (ya que sí eran últimos) o porque alguien me robó o no sé qué historias.
Me tranquilicé en el avión, no quería molestar a mi anónimo compañero de viaje emocionado por su primer vuelo al otro lado del charco. Me cubrí con la manta que me dieron en el avión y me dormí. Al cabo de 12 horas pisé ya la
fria y rocosa tierra madrileña.
Pero antes de dejarnos entrar en el aeropuerto, nos hicieron formar dos colas mientras dos aduaneros vestidos de un verde botella revisaban minuciosamente los papeles y hacían preguntas extrañas. Cuando me tocó a mí, saqué el pasaporte y escuché un Hola, pasa… ni siquiera lo abrieron, dejándome pasar como a una privilegiada. Asi que me fui directo a recoger mi maleta de la cinta.

26.6.08

Un bombón del autobús

Se sentó en frente en el autobús número 81 que me llevaba hacia el hospital a las 8 de la mañana. Al principio no me di cuenta con los audífonos metidos en los oídos escuchando la música con la cual pretendía despabilar. Pero cuando levanté la vista lo noté sentarse y sonreírme. Nuestras miradas cruzaron y vi el reflejo de mi rostro en sus grandes ojos negros, almendrados que brillaban como dos gotas de jade. Las pestañas las tenía largas y hermosas y se las podía ver cuando parpadeaba de vez en cuando. La tez blanquita, fina, hermosa, los labios de corazón, el cabello negruzco lo llevaba un poco más largo que como para un chico que le salían unos rizos graciosos detrás de las orejas. Y olía a fresas. Me enamoré. El encanto de enfrente me seguía penetrando con la mirada y yo sólo sonreía maravillada sin saber que hacer. Todo duró como diez segundos hasta que vino su madre, lo cogió en brazos con cariño y tomó su asiento. Un niño encantador.

25.6.08

las crónicas nocturnas: la fiesta de queso y vino

Nos reunimos ayer con un grupo de compañeras de la Facultad: seis chicas y yo (que también soy chica, claro). Y si me preguntaran, diría que la reunión resultó buenaza. Celebramos el fin del año académico y, sobre todo, la llegada de las vacaciones (que es mentira porque aún estamos esperando los resultados, sin embargo ya necesitábamos una fiesta para un relajamiento siempre bien aconsejable)

El encuentro se puede dividir en unas partes en las cualas cambiaba nuestro comportamiento, los temas de charla, etc. según los litros de vino que ibamos tomando.

Parte guan

  • Nos reunimos todas (excepto J. que es la más tardona) e intercambiamos saludos mientras apreciábamos la casa de K. y su esposo (quien no estaba porque ella le dijo que saliera a tomar aire mientras nosotras hiciéramos la fiesta, jeje, su esposo es recontra lindo y comprensivo) Al enterarme de que K. tiene wifi, intentaba abrir el Safari en mi ipod (una obsesión de revisar el correo)
  • Charlamos sobre las cosas de la uni y de los planes veraneos (G. se casa, J. y yo salimos a España, el resto se queda y se muere de envidia, jeje)
  • Abrimos la botella de Cin Cin

Parte Tu

  • Llega J.
  • Vino shileno, queso y papas fritas
  • Fotos y más fotos, mientras estábamos sobrias y salíamos como la gente normal (no como monos)
  • El tema principal: los chicos y los bikinis



Parte Fry

  • Una botella de vino español
  • Las chicas ya estaban alegres, asÍ que empezamos a jugar a Nunca en mi vida… que se convirtió en Nunca en mi vida lo hice con/en… que ya me pareció aburrido.
  • El tema principal: el sexo (como deben suponer del juego de arriba)

Parte For

  • Una botella de no-sé-qué que llevaba dentro cerezas (puede que fuera un licor, sólo lo probé), me estaba controlando y bien porque ya empezaron los temas de:
  • Los Anticonceptivos
  • Los Tamaños
  • Los Colores (sin comentario)
  • Y preguntas tipo: ¿Alguna vez lo hiciste con un chico ideal? (K., tu marido no cuenta)
  • Eso tomando las vieiras gallegas que, personalmente, me encantaron (tengo que buscar un buen restaurant en Santiago donde las sirvan)


Parte Fayf

- …

- ¿Tú crees que subí tanto de peso por los anticonceptivos?

- Yo que sé, mujer, yo nunca he tomado

- Oye, por qué todas lo han hecho y yo nunca?

- Mejor no empieces porque no terminarás

- Por qué te compras anticonceptivos si no tienes con quién hacerlo?

- Tú qué sabes qué voy hacer durante las vacaciones

- Oye, se lo voy a comentar a tu novio, pueees

- Calla!

- Yo me caso pues!

- Joder, que nos ponemos envidiosas

- Yo no me casaré, un matrimonio es una basura!!!

- Así?, a mí me gustaría pero no hay quien me lo pida

- Y yo haré de otra manera: me quedaré embarazada.

- No puedes, vas con nosotras de beca!

- A sí, verdad. Pero quiero un bebe.

- Quiero mi copa!!

- Yo me enamoro sólo de los rufianes y unos hijos de puta, por qué?

- Pucha jalé el examen ese, de literatura estoy segura…


Parte Six

  • Tema principal: la existencia de Dios y las bodas por Iglesia y por lo civil (!)
  • ¿Más vino? nooo

Resumen Al llegar a casa

  • Mis planes para el futuro son una mierda.
  • Soy ridícula, ya lo sé.
  • Ayer pasé un poco el límite. No debía salir a la calle ebria… veía todo doble hasta la bandera del Perú… pero qué hace acá esa bandera, me pregunto…
  • Me alegro al menos que siempre me controle y no beba tanto como el resto (gracias a lo cual llego a casa y me acuerdo de las cosas). Nos montamos en un tranvía creo que por suerte (se me olvidó que por la noche dejaban de circular)
  • No más papas fritas (y además las odio)
  • La ducha es un invento de dioses.
  • Quiero meme.
  • Aaaa es la una, mañana me despierto a las 7am para ir al gine.


FIN

23.6.08

Un día antes, un día después

Un día de enero, un día antes de mi viaje al Nuevo Mundo me visitó Érika para darme los últimos consejos y para despedirse de mí. Así conversando, E. llegó a ver una foto en mi computadora:

E: Pucha, Éste es él!! ¿De dónde sacaste esta foto?

Yo: ¿Quién?, pregunté asustada.

E: El chico que se enamoró de mi hace unos años! No me lo puedo creer!

Yo: (Mirándola a ver si no me tomaba el pelo) Pero cómo D. se enamoró de ti hace un par de años y yo no sé nada?

E.: No D., tonta, éste! Éric (rara coincidencia de nombres). Qué hace él en esa foto?

Yo: jeje, no lo sé, es un amigo de D. pero busca en Hi5, si lo tienes ahí y él tiene a D., te asegurarás que es el mismo Éric, no?

E. (buscando como loca en mi láptop): Verdad!!! Es él. No me lo puedo creer!

A mí me daba ya igual, ya me podía creer en todo. Incluso que yo conozco a D. quien conoce a Éric quien conoce a Érica que está aquí 10 mil de kms de Lima (a propósito: de Lima que tiene 17 millones de habitantes que yon sepa) conmigo. Yo soy fatalista.

Yo: Bueno, tengo las fotos de tu ex en mi láptop… jeje . En algunas sale medio calato.

E.: No es mi ex, ya? Sólo lo pretendía. …. A ver dónde sale calato…

Yo: Oye, mañana ya salgo al aeropuerto. Saludo a Éric?

E.: Qué roche…


(Ahora Érika se va con su amorcito y los padres de él al Perú para que él pueda pedir su mano (y aprovechando para ver Machu Picchu). Qué envidia. Érika, si no me quieres como tu esposa, llévame como un equipaje, méteme en una maleta aunque me tengas que cortar en pedazos. Please!)

***

Un día después me desperté en el hostal Lince (no es necesario que lean entre líneas) pensando que dónde c*** estaba. Ahhh, ya séeee. Mamaaaaá!!! ¿Dónde estás?

Fuera hacía un calorazo insoportable. Subí al escalón (había una ventana en el baño, detrás de la ducha. Me asomé. Vi la Avenida de Arequipa, los combis circulando como locos, los taxistas pitando (y todos los taxis eran ticos!), un perro ladrando desde una azotea. Pucha, ¿dónde estoy?!

Me tumbe en la cama pensando: pero que todo iba a estar bien... Luego sonó el teléfono de la habitación y llegué a escuchar una voz agradable diciéndome: Señorita, alguien le está esperando abajo…

Flashback

Me di cuenta de que me están leyendo de lo que me alegró mucho y lo que, a decir verdad, no esperaba. Este post es para los confundidos en cuanto a lo que escribo. A mí, personalmente, me gusta saber qué estoy leyendo, así que le pongo esta nota rectificativa.

Algunas entradas que hago tratan de las palabras (quise poner que no tratan de mi vida pero sería mentira ya que toda mi vida son fonemas, sílabas, palabras, frases, sus secuencias y todo ese rollo), o sea, no de los acontecimientos presentes o pasados que me afectan a mí.

Otros posts van, precisamente, de lo que no van los primeros. Entre ellos son: mi presente y mi pasado (a veces también mi fututo, pero en ese caso les miento o me engaño a mi misma describiendo mis esperanzas y mis deseos). Varias entradas cuentan sobre mi pasado aunque algunos de ustedes no se dieron cuenta (por lo que me comentan). Hice algunos cambios en las etiquetas y metí mis flashbacks en una llamada así. Ahora no habrá mayores problemas, creo. Si pongo FLASHBACK serán cosas del pasado ya que me gusta a veces volver (a menudo matándome) hacia aquellos momentos. Si me siguen leyendo, se van a dar cuenta.

Gracias por la atención.

La dueña de este blog

Quiero ser catedrática!

Concluido este año académico les comento que me entran ganas de ser catedrática también y:

  • no llegar a tiempo a las clases
  • (o no llegar a las clases)
  • no entregar los exámenes a tiempo
  • (o perder los exámenes)
  • llegar a clases sin material y hablar de Dios-sabe-qué
  • vengarme en los estudiantes por mi mal humor o por los problemas con mi esposo
  • no responder a los emails
  • no estar en la uni durante mis horas de consulta
  • hacer los exámenes después del comienzo de las vacaciones (para que mis estudiantes no puedan disfrutarlas) y hacerlos recontra difíciles (que ni siguiera yo sepa la respuesta)
  • joder todo el rato
  • fingir que yo lo sé todo y tú estudiante de mierda, no sabes naaaa
  • y encima ganar plata

Así que quiero ser catedrática!

21.6.08

Exotic-Erotic

¿Qué será si no te gusta mucho? – me preguntó J. un día de enero, antes de mi partida. Respondí que no pasaría nada y que qué podía hacer si ya tenía el pasaje en la mano. Mejor que no me guste demasiado, añadí. Porque si me gusta demasiado, me meto en problemas

Recuerdo que nos despertamos los tres a las 4.am. M. y R. me ayudaron a bajar el equipaje y me metieron en un taxi. Al cabo de dos horas estaba ya en Madrid extrañando Galicia y ni siquiera pensando en el viaje que me esperaba. Caminé a lo largo del Terminal 4 Satelite algo como 20 veces (harta caminata), me metí en todas las tiendas (incluyendo las de las carteras de mujer: odio las carteras de piel!), mirando los llaveros con toritos, abanicos de madera, cajas de turrones de almendra y hojeando (aburrida) un ejemplar de el País. Me compré 4 botellas de agua de la máquina que me hizo entrar al baño algo como 5 veces y, por fin, por la ventana vislumbró una máquina enorme que nos iba a llevar hacia el Nuevo Mundo. Leí los últimos mensajes de mis amigos qué no me secuestraran, qué tuviera un buen vuelo, que no me perdiera y qué no me quedara allá para siempre! La moza de la compañía llamó por altoparlantes que, por favor, los señores pasajeros nos pusiéramos en dos colas y bienvenidos al bordo!

Cuando escuché lo de: La temperatura en Lima es de 25 centígrados, son las 20:30, acabamos de aterrizar en el aeropuerto Internacional Jorge Chávez. Gracias por volar con LAN comencé a tener dudas… qué, mierda, me ha empujado a hacerlo. Voy pisando tierras ajenas (recontra ajenas)! Exotic-erotic. Ya saben.

20.6.08

Relaciones táctiles

Mis manos resbalan sigilosamente por la negrura de su cuerpo. Es una caricia recíproca, un desliz que despierta todos nuestros sentidos. Así, con una ternura equilibrada, obtenemos el máximo placer de nuestras relaciones táctiles, es un placer que al final cansa, e intentamos dormirnos acurrucaditos uno al lado del otro mientras él todavía me deja jugar con su suave y fácil de manejar (ADVERTENCIA: sigan leyendo, no es lo que ustedes se imaginan) pantalla táctil. Mi chiquito ipod touch.

Toda la tarde la pasé mirando lo que hay de nuevo en el mundo de las pantallas táctiles. Luego me dormí y soñé con una pantalla LCD que había visto, una de 22 pulgadas que, en realidad, no es sólo una pantalla, sino una computadora completa con todo el sistema operativo, pero que aparte lleva una capa de software que garantiza su manejo a través del tacto y así todo es mucho más sencillo y muy intuitivo. Si embargo un Touch Smart de esos, de HP no me sirve. Quiero algo que se pueda llevar a todos lados, algo como una láptop con una pantalla chiquita. Las hay de 9 pulgadas y peso de 1 kilo pero, desgraciadamente, se parece demasiado a aquel Asus de 7 pulgadas que es como el antiguo libretto, un asco de plástico que, además da miedo moverlo. Quiero un Voodoo (Envy 133) blanco de 13 pulgadas y finito; o mejor un Mac book Air de Apple que es recontra lindo que podría llevar a cualquier sitio metiéndolo en un sobre, nomás. Es blanquito, tiene pantalla de 13 pulgadas y finito (0,4-1,9cm) hecho de aluminio. Tiene el pad con la función multitouch, como la de mi ipod y que ya, a decir verdad, no es nada renovadora. Puedes aumentar el tamaño del objeto dándole un pellizquito, o uno a la inversa para hacerlo más pequeño, así como de siempre. Ojalá el Mac Book tuviera la función táctil en la misma pantalla. Así sería más chévere. Y ojalá no costara tanto, que da miedo mirar el precio. Anímense, quién me regala una estrellita de esas? Please. La quiero!

Mientas así pensando, seguía escuchando mi ipod, que pobre necesita otros audífonos ya que los que tiene se me han malogrado. Pero no me llega plata ni siquiera para una cosa tan simple como unos auriculares de Apple… Es así la vida de una pobre estudiante: dura :(

Me duermo encima de mi láptop que tiene un año y medio y ya me da la gana de cambiarla. Tengo más de 5000 soles para comprar una computadora portátil, pero no se crean: la plata no es mía, el juguete tampoco lo será :( Yo sólo tendré el "placer" de elegir uno que me guste y luego lo voy a entregar a mi padrino, que es él que paga. Que envidia…

Bueno, al final llego a la conclusión de que una no puede tener todo para que pueda soñar con este... ALGO (o con ALGUIEN). Ahorita soñé con ALGO, para variar.

18.6.08

4 hallazgos

Al final me puse a ordenar mis cosas a la 1am. Siempre tengo ganas de hacer la limpieza a las tantas. Los resultados de la acción:

- unos 4 kilos de papel (fotocopias, folletos y otra basura que ya no voy a usar sobre todo en España) asi que se va todo para el reciclaje.

- más 4 kilos de polvo que había entre los papeles (por algo pesaban tanto)

- Poesía quechua, aforismos de Pachacutek (para las clases de la literatura precolombina :S)

- 4 dólares y 10 soles que no tengo donde gastar.

Y además:

- 4 hallazgos que me sorprendieron al llegar al fondo del armario:

Hallazgo número 1


Lo tengo de Santiago. Una de esas cosas que te dan en la tienda con el número de prendas que te llevas al probador. Parece que yo me llevé 3 prendas. Y parece también que me llevé la cosita esa a casa. Me di cuenta cuando ya estaba fuera. Y no sonó la puerta (la cosita lleva un chip) ni nada. Es un recuerdo algo original, además no se cómo se llama. Ideas?

Hallazgo número 2:


El recuerdo de un hostal. Quería llevarme una toalla pero no soy tan caradura… Sé que piensan acerca de los hostales de Lince pero no fue mi caso…

Hallazgo número 3:

Una hoja con un texto que escribí hace algún tiempo y se titulaba “Cómo me hiciste mujer” que se hizo muy famoso en mi facultad. Y tampoco es lo que ustedes creen…


Hallazgo número 4:




¡Qué cosa más rara! ¿Será un relicto? Ni idea dónde podría leerlo. Uso una laptop nueva así que no se lo voy a meter por ningún lado. Creo que lleva algunos datos de aquellos tiempos remotos cuando estaba en el cole. Quiero ver que lleva!

17.6.08

Antes de partir: unas imágenes

Mi madre: ¿Por qué andas tan preocupada, mi hija?

Yo: Por nada, mami.

Mi madre: No me engañes, pues. ¿Qué tienes?

Yo: Naaaada

Mi madre: No, no me vas a mentir. No es normal que una se compre un pantalón 3 tallas más pequeño y aún le quede grande.

Yo: Yo diría que es positivo, pues.

Mi madre: Andas estresada.

Yo: ...

Mi madre: Se te ven los huesos de la cara.

Ya: Mamá, por favor!

Mi madre: ¿Ya sabes dónde te vas a quedar en Santiago?, ¿con R?

Yo: Sí pues, pero no con él, sino en su casa.

Mi madre: ¿Esto qué significa?

Yo: Nada. Me ayudó a alquilar un cuarto. Es un amigo, nomás.

Mi madre: Ya conozco tus inclinaciones hacia tus amigos…

Yo: ¡Mamá!

Mi madre: ¿A qué no te acuerdas del último?

Yo: ¿Tienes que volver siempre al mismo tema?

Mi madre: es que en tres meses cambiaste tanto…

Yo: (silencio)


Mi cuñada me pregunta porqué no estaré en la fiesta de su cumple. Le digo que el 2 de octubre estaré en España, que no vuelvo. Tampoco estaré en el cumple de mi madre (y cumplirá 50 años) el 30 de septiembre. Ah, y cómo ella lo sobrevivirá? - Bromea mi cuñada. No está muy contenta. Le dije que le iba a mandar una cosa bonita y se tranquilizó. La voy a llamar a menudo. Qué más puedo hacer si ya no vuelvo hasta el diciembre. ¿Y no estarás cuando nazca mi bebe, ah? Me pregunta mi cuñada. Tampoco. :(


Debo empezar a hacer maletas. Mi cuarto parece estar hecho una cuadra. He de poner un orden: recoger las cosas etc. Pero me da flojera. Y todavía más flojera me da cuando pienso en hacer las maletas para irme allá, lejos. Bueno, pensándolo bien, quedan aún dos semanas… o sea, aun queda tiempo. Sólo iré apartando los libros de mi cama. A ver que hay: Bayly, Bayly, Bayly, Roncagliolo, Vargas Llosa, Vargas Llosa, otro Bayly….Jeje, todo lo que leí para el examen de literatura hispanoamericana. Y mi listado estaba chévere. Mejor que el de G. que puso 3 libros incluyendo Cien años de soledad que es una posición básica, poniéndole las páginas 1-161 (de sus aprox. 400)!! Es que mi amigo G. es tremendo.


Pensé que en esas dos semanas que tengo delante tendré que despedirme de mis amigos. Pensé también que no tengo muchos. A algunos de ellos no los volveré a ver hasta dentro de mucho tiempo. Pero, sinceramente, a mí las despedidas se me dan fatal casi prefiero no despedirme…

16.6.08

Conferencia transatlántica

Cuando en febrero llamé a J. a Polonia desde Cuzco, me la imaginé vestida de un chaqueta gruesa de invierno con una bufanda y unos guantes respondiendo mi llamada, mientras yo andaba en pantalón corto y un polo. Además tuve cuidado para no molestarla demasiado tarde. La llamé a las 7pm, en Polonia eran las 11pm así que aún no dormía. Pero la diferencia de 6-7 horas y de 20 centígrados no era todo. Sí señores, me la aluciné en posición normal, o sea, vertical, en cambio NOOOOO, su cuerpo estaba inclinado hacia otro lado, hacia el noroeste mientras el mío, hacia el sureste. Así que cúales de las partes de nuestros cuerpos estaba más cerca? Nuestros pies, pues. (Vean el dibujo, lo pueden ampliar si desean) Quizás parezca obvio para algunos, pero en realidad ¿alguien se imagina conversar de esta manera? Me parece bastante incómodo.

Cuidado, D., qué no te caigas mientas me llames!

12.6.08

simulando un delirio

Me siento en el sofá mirándolo con deseo y voy simulando un delirio. No tengo cigarrillos. No los necesito porque no fumo. Me basta cerrar los ojos voluptuosamente y olerlo. Percibo su fresca fragancia y su tierna textura bajo las llamas de mis dedos que dentro de un momento se derramará en el apretón de mis labios mientras agarre con fuerza la curvatura de su cuerpo. Me lo voy a comer, tan lindo entre mis manos en cuanto termine simular mi delirio. Me lo como dulce y húmedo, mi trozo de sandía que tengo delante.

Lo comparto con ustedes, est
á a la derecha.

10.6.08

Entrégame el anillo, Frodo*

Cuando te regalan un anillo es preciso que te alegres y que te lo pongas, especialmente si es de oro y si es un regalo de tu enamorado. Pero cuando una de aquellas condiciones falla (sobre todo la segunda) ya no parece tan chévere.

No lo podía mirar. No era capaz de abrir aquella pequeña cajita que lo ocultaba. Él me lo regaló a modo de una trampa. Si no hubiese sido así, no me lo habría quedado. Quería botarlo pero me daba tanta pena la persona que me lo regaló, aunque nunca sentía nada por él y jamás sentiré. Quería devolverlo pero no sabía cómo y además qué roche, pues. Mis dos intentos de devolverlo personalmente acabaron sin resultado alguno. Una vez se me ocurrió la idea de mandarlo por correo al chico que me lo regaló, en cambio, alguien me dijo que así no se hacía. ¡No se qué se hace! Fue la primera vez que me dieron un anillo de novios y lo odiaba. Lo guardé para que no lo viese nadie a pesar de lo lindo que era.

Llevé casi un año procurando deshacerme de el y al final lo conseguí. Ayer vino J. preguntándome por el anillo. Le dije que se lo llevase porque ya me tenía harta. Y J. feliz lo aceptó (aunque creo que fue su idea, que se lo regalara, no importa). J. se lo va a poner para joder al amor de su vida que no le hace ni un puto caso. Me dijo que debía de estar (yo) medio loca: estar enamorada de una persona, salir con otra y recibir los anillos de tercera. Pero no fue mi culpa, pues. Este año ya no voy a caer en trampas. Nunca más… :(


* Alusión a creo que ya saben que. Antes me llamaron Frodo por el terrible corte del pelo que llevaba.

9.6.08

Me llamo D.

El local está a tope y lo peor de todo es que exactamente hoy no me da la mínima gana de meterme en ningún bar. Pero J. quiere y que le vamos a hacer. Entramos, pues. A la derecha algunas parejas bailando: los cuerpos pegados en el ritmo de bachata. El tiempo no ha logrado que te olvideee… El aire vibra y retumba, se siente un fuerte aroma a tabaco y una sutil fragancia de quiero-hacerlo-contigo-hoy-ahora-frente-a-todos. Me da asco. Quiero salir. J. me dice que hemos quedado con su amor y debemos esperar un toque. Pero yo igual quiero salir corriendo, darme una vuelta por Alameda o irme directo hacia el jato, encerrarme en mi cuarto, tragar unas pastillas contra la jaqueca y dormirme. Pero no me muevo de mi sitio. A mi derecha un cuarentón repelente manosea a una chica (o tal vez sea al revés). Qué tonto que locos somos tu y yo… A la izquierda, en cambio, un tipo con pinta de latino (supongo que es aquel chileno sobre quien creo haber escuchado historias) me mira de reojo y saca la punta de la lengua para lamerse el labio superior como si fuera (él, claro) una prostituta. No le hago mucho caso. Pido un trago, qué me pongan un cuba libre de Bacardí. No tienen, piña, entonces naa. Bueno, una chela de esas de manzana. Y yo no quiero seguir así estando con ella y pensando en ti… En mi cabeza vislumbran algunas imágenes entrecruzadas: el baño de Larcomar al lado de Aura, letra de una canción de J. L. Guerra que no quiere salir por mi boca, el color bermejo de los sofás, unos tragos rápidos de tequila y de repente, alguien me pone su mano en la cintura y me besa, me besa un tío que ni puta idea quien es. Primero me besa y luego me saluda y dice que se llama D*. Le miro a J. temerosa: está echando chispas por los ojos (y por los dientes). Se me arrima furiosa y me dice que D. es su propiedad. No lo niego, le digo que qué me importa un tal D. Qué me dejen en paz. Luego despierto con la cara llena de lágrimas y con unas ganas inmensas de desaparecerme ahora mismo. Qué raro el sueño.



* Creo que esta entrada necesita ponerle una nota rectificativa. Obviamente el D. del cual estoy hablando no es el D. de siempre, o sea, no el mío. Es el D. de J. (es decir su amigo sea o no con derecho) y lo voy a ver el viernes por primera vez. Coincidencia de nombres, pues. Si fuera el mío la escena no terminaría así y seguro no en ese huachafo local. Y entonces habría matado a cada uno que me hubiera despertado. :)

8.6.08

Quieres casarte conmigo?

- ¿Quieres casarte conmigo?

- En mi puta vida. - dije

Cuando te hacen esa pregunta problemática la respuesta puede ser: sí, no, no sé u otras variaciones tipo es que me has sorprendido, de verdad, déjame pensarlo: sinónimos de “Qué se te ocurre, Claro que NOOO”). Yo, en cambio, no lo pensé mucho y usé ese sutil sinónimo de NUNCA JAMÁS:

En mi puta vida – dije… y aprobé.

No me puedo creer aún que mi examen de grado fuera tan fácil, o al menos tan entretenido. Me dejaron soltar tacos durante 10 minutos bajo la condición de que no repitiera ninguno. Así pasa cuando una tiene suerte y le toca el tema de vulgarismos españoles como me tocó a mí durante mi examen de Lingüística. Así que hice una pequeña revisión de insultos, groserías y sus respectivos eufemismos pintando sin roche un panorama de situaciones en las cuales se suelen emplear palabras vulgares en castellano. Y parece que no me fue tan mal. A ver:

Los vulgarismos se tienden a emplear en las situaciones de enfado o disgusto cuando el hablante intenta imponer su voluntad mediante órdenes enfatizadas (¡Cállate, coño! ¡No me toques, joder!) sobre todo cuando la idea es insultar al interlocutor: Todos ustedes son unos hijos de puta, o Tú eres un cabrón; Me pareces un cerdo (en base a la comparación del interlocutor con los animales). Ahí va, el imbécil de tu hermano (haciendo alusión a la baja capacidad intelectual del individuo).

Junto con las lamentaciones: ¡Mierda, siempre llego tarde! Se nos acabó la gasolina, me cago en Dios (empleando la muy famosa expresión de cubrir las necesidades fisiológicas), Manda cojones, otra vez me toca a mí limpiar la casa (qué mala suerte).

En las preguntas, en la posición después de pronombre o adverbio interrogativo se emplea muletillas con un fin enfático concreto: ¿Qué , cojones, haces aquí?! ¿Qué, coño, te pasa?

A fin de destacar los rasgos de fealdad de alguien: Cara de culo, o lo poco de valor que tiene un objeto: la mierda de mi carro o persona: ven acá, obrero de mierda.

Para hacer hincapié en lo lindo- lo interesante- lo divertido- etc. que nos parece una cosa/persona: La película estuvo de puta madre (el sinónimo de buenísima). Es una web cojonuda! (sumamente interesante, etc.) Este chico no tiene cojones (es cobarde).

Para expresar sorpresa:

Pero, ¿estás de coña? (Estás de broma)

A fin de comparar :

callarse como un puto (así en masculino)

como putas en cuaresma

trabajar como un cabrón

quedar como el culo

ser culo y mierda

estar hecho una mierda

ser más antiguo (viejo) que (el) cagar

ser más viejo que el mear/ que el mear de pie

ser más feo que cagar

Para negar.

-¿Sabes cómo se llama la hija de Manuela?

-Ni puta idea (no tengo la menor idea)


O rechazar la propuesta/Pedido:


-Me prestas un billete de cien?

-Jódete! (Pues, yo creo que no es posible que te lo preste).


Aquí me hicieron reaccionar a la pregunta: ¿Quieres casarte conmigo?

En mi puta vida. Pues


Con expresiones fijas que se convirtieron casi en las estereotipadas, como:

Estoy de mala hostia (Estoy de mal humor), se pegó una hostia (se golpeó), Házlo de una puta vez (de una vez, por fin) Trabaja de noche es una putada (faena o mala acción). Estoy hasta los huevos (Estoy harto), ¡Es la coña! (Es un colmo), Es un coñazo trabajar en una oficina (Es aburrido, duro), Su casa está en el quinto coño (está muy lejos), Olé tus huevos! (Expresión de ánimo y aprobación) ¡No jodas! (No me digas) y mucho más.


Sin embargo, para los que no tan abiertamente pueden/quieren/saben utilizar las palabras vulgares tenemos una ancha paleta de eufemismos que les proponemos emplear siempre y cuando quieran. Ahí van los ejemplos con cambios:


¿Qué, rayos, te pasa?

¡Miércoles, siempre llego tarde!

¡Jolín, no me toques!

¿Qué, diablos, haces aquí?

Ostras, ¿tú aquí?


Obviamente, existen variantes regionales de algunos vulgarismos: carajo, carayo, conchatumadre, joba, chingada y diferentes frecuencias de uso en lugares distintos con preferencia de España ya que como es bien sabido los españoles suelen soltar tacos por todos lados y nadie se ofende ni nadie se sorprende (ni nadie se da cuenta, en realidad).

Así que, entre otras cuestiones, gracias a ser vulgar me gradué. A veces vale la pena :P

6.6.08

Adivina qué es…

lo que no deja comer

que no permite dormir

que te empuja a beber

y que te hace sufrir?


Ya saben?

5.6.08

Despierta, a la chamba!

Cuando termine de hacer lo que tengo pendiente acá (o sea, estoy de exámenes) cambio de aires y me voy a España. Me dieron 2 becas y si me dan tercera (que es muy poco probable) en seguida me compro un pasaje para el otro lado del charco. Quisiera felicitar a C., a quien también le dieron una así que no sólo vamos a pasar juntas las vacas en SCQ sino también luego viviremos bastante cerca. Y eso me alegra.

Hablando de SCQ, no puedo omitir la cuestión de la chamba a la cual pienso volver casi nada más llegar desde el aeropuerto hasta Santiago de Estero número uno. El año pasado el trabajo fue muy duro, así que mejor me preparo.

A mí lo que no me gustaba de mi trabajo (curro, como lo llaman los españoles) fue:

1) los clientes conchudos, molestos y que encima no dejaban propina

2) los compañeros perversos que no paraban de hablar del sexo (en realidad sólo hablaban del sexo o si no del sexo, entonces, del sexo)

3) trabajo de partida (o sea todo el día jodido porque para que necesito 3 horitas de siesta si ni siquiera me alcanza para ir al jato ni para compras ni pa nada)

4) el trabajo los fines de semana y durante las fiestas (SOBRE TODO durante las fiestas). Así que tú que trabajas acá no tienes día feriado, piña. Porque en hostelería ASÍ SE TRABAJA, pues.

5) que las propinas había que dividirlas entre todos mientras sólo las ganaba yo (y además, era poco)

6) el almacén al que había que bajar por la mercancía y ahí no había quien aguantara el calor que hacía

7) los calambres que me daba la chamba de 10-12 horas a pie que me despertaban a las 4 de la madrugada con un dolor inaguantable

8) los moratones que me hice con las cajas de cerveza

y algunas cuestiones más de las que ya no me acuerdo (o finjo no acordarme)

Me preguntan: ¿si es que tanto no te gustaba por qué quieres volver allá?

No es que no me gustaba para nada. Sí que me gustó el ambiente, las interminables charlas con algunos de mis compañeros, sonrisas de los clientes contentos, sonrisa del jefe contento (o sea, la subida del sueldo), la coca-cola gratis, los momentos cuando mis compañeros (masculinos) me dejaban hacer de encargada y podía pasar todo el santo día dándoles órdenes…

Eso sí, y es más, ganaba bastante como para comprarme un montón de ropa, nuevo cel, viajar por Galicia, tragos en bares hasta las tantas y, lo más importante: un pasaje al otro lado del charco y unas lucas más para poder pasar 3 semanitas allá gastando plata por todos lados.

Eso sí, fue lo máximo. El punto más chévere de mi chamba.

4.6.08

Están en todas partes

Ocupadísima bajo un momento al super nomás y ya escucho detrás mía:

-HoSHtia, no me Jodas, tío, que éste tampoco funFiona…

(Los españoles están por todas partes, también usan el cajero de mi barrio.) Les digo:

- Me parece que no tiene pasta, prueba con el otro que está al subir la cuesta

- Joder, una española...

(Nup, sola una chica del barrio)

3.6.08

las crónicas nocturnas: historia de una mudanza

Z. iba a mudarse del depa pero por el montonazo de maletas, maletines y bolsas que tenía no era posible que se mudara en transporte público así ¿a quién llamamos? A J. que es la única con buena fe, permiso de conducir y con un carro (imprescindible).

A las 21 J. llamó que ya estaba abajo (vivimos en el 6º) Entra, pues. Mientras Z. y yo sacábamos sus pertenencias a la escalera. Tras esperar un buen rato llegamos a la conclusión de que el ascensor se debía de haber malogrado Pucha, hay que bajar toda la vaina por la escalera. Z. estaba esperando con su montoncito en el 6º, entonces yo para adelantar un poco la cosa bajé un pequeño porcentaje de las maletas.

J. no me esperaba abajo. ¿Habría desaparecido? Sonó el cel. ¿Dónde estás? En el ascensor, pues, se paró entre el 2º y el 3º. Analicemos la situación: Z. estaba arriba vigilando sus pertenencias, yo abajo con su laptop y no-sé-que-pero-pesaba-de-carajo metido en las bolsas que se me estaban desgajando en la mano y J. cerrada en el ascensor con una familia de 5 obesos de la cual nos enteramos después. Subí hasta el 3º (con las cosas de Z.) Golpeé la puerta del ascensor: ¿J., Estás viva? ¿Hace calor? - Sí pues, que quieres que te diga. Pucha, eso merecía un brindis: bajé de nuevo para comprar una gaseosa. Volví a tocar la puerta del ascensor entre el 2º y el 3º. ¿Cuándo vendrán a rescatarnos? No se sabía. La empresa que arreglaba los ascensores malogrados en aquel momento estaba rescatando a otra gente en otra parte de la ciudad. ¿Con quién estás?- Somos sólo chicos, escuché una voz masculina que pertenecía a un hombre bien sudado y que olía a una lata de cerveza (como nos comentó luego J.)

Al final, cuando, la pobre salió del aquel infierno decidimos bajar las cosas a pie. No se quejen, hay que mantenerse en forma (me duele todo el cuerpo). No nos metimos otra vez a la mierda del ascensor. Ni hablar! Ya me imagino que será cuando tenga que marcharme yo.

Abajo J. estaba intentado meter las maletas al carro (era tanto porque Z. no se quería despedir de su colección de revistas francesas ni del resto de los papeles que acabaron tirados en el suelo). Otra vez para adelantar la cosa, les dije a las chicas que me iba a botar la basura que se había acumulado durante la mudanza (al contenedor de la esquina), ahí les espero. Como podía prever, no aparecieron allá donde habíamos quedado. Desde lejos divisé el carro de J. parado en la acera. Avancen, le señalé con toda la fuerza de mis brazos haciéndome el payaso en el medio de la calle en la mitad de la noche. Nada. ¿Por qué no arrancaba el carro? Sonó el cel: "J. llamando". ¿Dónde estás? - ¿Tú dónde estás? Yo estoy yendo para allá. -OK, y por qué tardas tanto? Te espero en la esquina del super. -Noooo, escuché, Que Z. salió del carro para buscarte y ni idea dónde se marchó. ¡Vuelve a la basura!

….

We're the heroes! Z. está viviendo en un sitio nuevo. Ya pasó. Yo, solita en mi cuarto imaginándome qué voy a hacer sola y sintiéndome abandonada. Suerte, queda un mes y también cambiaré de aires. Un mes, nomás.